La beca Erasmus otorgada por el SEPIE a Ainhoa Pino le ha permitido vivir y trabajar en el sur de Italia durante 3 meses.
Ainhoa nos cuenta su experiencia de primera mano para animar a otros estudiantes del centro a solicitar la beca.
Mi experiencia del Erasmus+ la viví en Lecce, una ciudad que se encuentra al sur del país, en la región de Puglia, que es lo que en el mapa de italia se ve como el tacón de la bota.
Lecce es una ciudad muy bonita, con arquitectura estilo barroca en la que hay varios monumentos para visitar, también tiene calles muy bonitas por las que perderse. Es una ciudad muy cómoda para caminar, ya que no tiene cuestas o no muchas y no te cansas tan fácilmente. La comida es muy buena en general, hay platos típicos de la zona que te recomiendo no perdértelos como los «orecchiette», que es pasta o los «taralli» que son rosquillas de pan que se toman como snack. Los italianos al principio pueden ser cerrados y darte la sensación de que no te acogen pero solo es como «la capa externa», después generalmente son muy majos, te ayudan un montón.
Las prácticas las hice en la farmacia de Pascalis que está en el barrio de San Pio. Mi experiencia en la farmacia ha sido muy buena. Al principio me costó comenzar ha hablar con ellos por mi forma de ser, porque yo soy muy cerrada y me cuesta hablar, pero ellos en ningún momento evitaron hablarme o explicarme cosas, todo lo contrario, contaron conmigo desde el principio, haciéndome sentir parte del equipo. A mi personalmente eso me ayudó mucho para hablar y soltarme.
El idioma sí que lo he aprendido. Yo creo que en una conversación me podría defender bastante bien. En la farmacia me han ayudado mucho con esto porque me decían las cosas en italiano, si no entendía me daban contexto o gesticulaban y estar en un entorno en el que tienes que hablar el idioma ayuda mucho.
Con los compañeros de viaje hemos tenido una convivencia tranquila y hemos pasado buenos momentos juntos. También he conocido a gente nueva, otras personas que estaban de erasmus y personas que viven ahí. Eso ayuda mucho a cambiar tu experiencia del Erasmus, tienes oportunidad de hacer muchos más planes.
Considero que es una etapa que recomiendo que no te saltes porque te lo vas a pasar genial. Vas a conocer a un montón de gente, un montón de lugares. Vas a tener millones de anécdotas y millones de momentos super divertidos. A parte de ésto, también creo que ayuda a que tú te conozcas a ti mismo, y eso también es algo que necesitamos, aprendemos a defendernos en situaciones que no habíamos vivido (o igual sí, yo había muchas que que no). Aprendes a hacer cosas nuevas, igual descubres algo en lo que eres buenísimo y no lo sabías.
En resumen así muy resumido, la experiencia es muy recomendada y si tienes miedo, hazlo con miedo porque luego lo recordarás todo y verás que mereció la pena.
Gracias Ainhoa Pino por compartir con nosotros tu experiencia en el Erasmus.